Neoliberalismo (II)

Lo dijo AMLO en el discurso de toma de posesión: “En cuanto a la ineficiencia del modelo económico neoliberal baste decir que ni siquiera en términos cuantitativos ha dado buenos resultados”.

¿Por dónde empieza AMLO su crítica al neoliberalismo? Por la parte cuantitativa, relacionada con el crecimiento de la economía, que se mide por el comportamiento de la producción de bienes y servicios para el consumo final, el Producto Interno Bruto, debiendo reconocer que AMLO tiene razón: en términos de crecimiento la época neoliberal, de 1983 a 2018, dio malos resultados.

AMLO hizo referencia a los tres periodos más recientes en la historia de la economía mexicana: el Desarrollo Estabilizador (1959 – 1970), la Docena Trágica (1971 – 1982) y la Época Neoliberal (1983 – 2018). Durante el Desarrollo Estabilizador el crecimiento promedio anual de la economía mexicana fue 6.8 por ciento. A lo largo de la Docena Trágica resultó 6.2. Durante la Época Neoliberal fue de solamente 2.5 puntos porcentuales, algo que AMLO califica, con razón, como “pobre resultado”, mismo que pretende corregir.

AMLO no lo mencionó en el discurso de toma de posesión, pero lo ha dicho con frecuencia: la meta de crecimiento económico para su sexenio es del 4 por ciento, para lo cual se requiere que directamente se invierta más de lo que se ha invertido en los últimos 36 años, inversión directa que es la que produce bienes y servicios, variable con la que se mide el crecimiento de la economía. Y no hay vuelta de hoja: si la economía mexicana ha de crecer más en la economía mexicana deberá invertirse directamente más, y dicha inversión deberá ser principalmente privada, tanto nacional como extranjera, debiendo ser la gubernamental complementaria de la privada.

Al respecto AMLO dijo que “vamos a impulsar proyectos productivos con inversión pública y privada, nacional y extranjera”, y se refirió al Tren Maya, a la siembra de árboles frutales y maderables, al tren de carga Salina Cruz – Coatzacoalcos, a la nueva refinería, todo lo cual puede ayudar, pero lo principal es garantizarle, a los particulares que inviertan directamente en el país, la libertad para producir, ofrecer y vender, y su contraparte: la propiedad sobre los medios de producción, oferta y venta, libertad individual y propiedad privada que son parte esencial del modelo neoliberal, el mismo al que AMLO le echa la culpa de nuestros males, al grado de afirmar que “(haremos) todo lo que podamos para abolir el régimen neoliberal”. Y en eso, en la abolición del neoliberalismo, consiste el cambio de régimen que se pretende con la Cuarta Transformación. Y así, aboliendo el régimen neoliberal, la economía no va a crecer más, al menos no de manera sostenida.

No necesitamos menos, sino más, ¡y mejor!, neoliberalismo: libertad individual, propiedad privada y responsabilidad personal.

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Arturo Damm Arnal

Estudié economía, filosofía y derecho. Liberal. Profesor universitario. Periodista. Conferencista. Colaborador de @LaRazon_mx y @adn40 .