Tres han sido los errores más graves cometidos, en materia económica, en los últimos 36 años. Primero: la expropiación de la banca en 1982. Segundo: el tristemente célebre error de diciembre de 1994. Tercero: el que ya se conoce como el error de octubre (2018), la cancelación de la construcción del NAICM en Texcoco. El primero y el tercero son de naturaleza distinta comparados con el segundo, por lo que sus consecuencias fueron (en el caso del primero y del segundo) y serán (en el caso del tercero) diferentes.
El error de diciembre de 1994, que consistió en la manera burda con la que se abandonó la banda de fluctuación del tipo de cambio peso – dólar, generó, de manera inmediata una grave situación de estancamiento con inflación. En 1994 la economía creció 4.46 por ciento, en 1995 decreció 6.22. En 1994 la inflación fue 7.05 por ciento, en 1995 repuntó hasta 51.97.
La expropiación de la banca en 1982 no generó una situación de estancamiento con inflación. Esa condición ya afectaba a la economía mexicana desde antes. En 1982 la economía decreció 0.52 por ciento. En 1983 decreció 3.49 por ciento. En 1982 la inflación fue del 98.84 por ciento. En 1983 resultó menor, 80.87 puntos porcentuales.
La consecuencia más grave de la expropiación bancaria, más un capricho de López Portillo que cualquier otra cosa, fue el debilitamiento de la confianza de los empresarios en la economía mexicana, lo cual se tradujo en menos inversión directa, lo cual dio como resultado, a lo largo del sexenio de De la Madrid, un crecimiento promedio anual de la economía de solamente el 0.76 por ciento. A ello hubo que sumarle una inflación, también promedio anual, del 86.21 por ciento.
Más allá de los efectos inmediatos del error de octubre en la bolsa de valores (baja) y en el tipo de cambio (alza), sobre todo si el Banco de México hace su tarea, no debe haber un repunte en la inflación, mucho menos uno significativo. Los efectos del error de octubre se darán en el mediano plazo, y tendrán esta secuencia: 1) menor confianza en el gobierno de AMLO; 2) menor confianza en la economía mexicana; 3) menos disposición de los empresarios para invertir directamente; 4) menos inversiones directas; 5) menos producción, menos empleos y menos ingresos; 6) menor crecimiento de la economía; 7) menos posibilidades de mayor bienestar para la gente, secuencia que debe revertirse de la única manera posible: reconociendo el error y enmendándolo, es decir, cancelando la decisión de cancelar la construcción del NAICM en Texcoco, algo que, muy probablemente, AMLO no hará.
¿Cuál es el común denominador de los tres grandes errores, en materia económica, de las últimas décadas? Las malas decisiones del gobierno. No hay poder, en la iniciativa privada, ni en ningún otro frente de la economía, que pueda ocasionar los problemas que ocasionaron los tres errores antes mencionados.
E-mail: arturodamm@prodigy.net.mx
Twitter: @ArturoDammArnal