Los mercados se movieron violentamente el jueves cuando el mundo reaccionó a la invasión rusa de Ucrania. A medida que las tensiones aumentan en Europa del Este –luego de que el presidente ruso Vladimir Putin prometiera una “respuesta contundente” a Occidente si continúan las sanciones– los activos de refugio seguro como el oro se mantuvieron subiendo de precio en comparación con otros activos como las criptomonedas. El bitcoin cayó primero bruscamente al punto de abrir una  oportunidad de compra que lo hizo rebotar fuerte ayer mismo.

Para entender mejor los movimientos de estos dos importantes activos, Frank Holmes, inversionista y director general de la firma U.S. Global Investors, dijo en entrevista con Kitco que el oro se ha comportado históricamente bien durante las crisis políticas y ve su precio subiendo hasta un 50 por ciento más desde los niveles actuales.

Holmes recuerda que hace dos años el oro subió dos desviaciones estándar durante los primeros nueve meses por la pandemia, así que si volviera a subir otras dos desviaciones estándar, podría llegar a los 2,800 dólares por onza. Al cierre de este artículo el oro cotizaba en 1,917 dólares. “Subir dos desviaciones estándar no sería extraordinario, pero subir tres desviaciones estándar en doce meses sí que lo es”, añadió Holmes.

“El oro está infravalorado y creo que probablemente valga 4,000 dólares más si tenemos en cuenta la impresión de dinero en todo el mundo. En este sentido, entonces estamos hablando de 7,000 dólares (la onza) o más. Pero me siento cómodo pensando que el oro puede llegar fácilmente a los 2,500 o 3,000 dólares por onza“. Y estamos de acuerdo.

El bitcoin, por otro lado, ha reaccionado primero negativamente al aumento de las tensiones geopolíticas en Ucrania, lo que abrió la puerta a una esperada oportunidad de compra que los inversores NO podíamos desaprovechar y por eso, en nuestro canal privado de Telegram, mandamos la alerta de compra respectiva.

Pero: ¿Cuál es la ventaja del oro sobre el bitcoin?

Frank Holmes, un experto del oro y los metales preciosos, comenta que el rey de los metales tiene profundidad y un significado histórico como un activo de seguridad, y más en tiempos de guerra. Por otro lado, el bitcoin es un fenómeno nuevo que tiene apenas una década, por lo tanto, su ecosistema en todo el mundo es nuevo y está a prueba.

Si bien el bitcoin es ampliamente adoptado por las generaciones X, Y y Z y los millennials, el oro tiene un significado histórico fenomenal que siempre que hay una gran inflación o hay agitación política, es el activos de elección de los inversores más inteligentes.

“Las guerras y las tensiones geopolíticas han proporcionado en el pasado vientos de cola para el oro, y el Bitcoin todavía tiene que superar sus retos regulatorios antes de despegar. Una vez que haya más normas y regulaciones en el ecosistema, el Bitcoin tomará su próxima etapa”, dijo Holmes.

La Fed apoyará la subida del oro

Por si lo anterior fuera poco, de acuerdo con el banco de inversiones Wells Fargo, el mercado alcista del oro no se detendrá por la serie de subidas de tasas de la Reserva Federal, que se espera que comience en marzo.

Erróneamente muchos inversionistas creen que a medida que las tasas de interés de corto plazo aumentan, existen activos que pueden proporcionar un flujo de ingresos más atractivos que el oro que da rendimiento cero. También creen que el oro tiende a utilizarse sólo como una cobertura contra la inflación y, a medida que la Fed suba las tasas, estará combatiendo la inflación e indirectamente la subida del oro. Pero esto, es un error.

La historia cuenta un desenlace diferente, por lo que Wells Fargo compartió su análisis del precio del oro durante los anteriores ciclos de subida de tasas que se remontan a 1994.

“El oro ha rebotado típicamente tras las subidas iniciales de tasas de la Fed. Curiosamente, después de pasar apuros en los meses previos a la subida inicial de los tipos, el oro ha tendido a repuntar más alto e incluso a superar al índice S&P 500 en los meses posteriores. En otras palabras, creemos que el oro aún puede brillar a la sombra de las subidas de tipos de la Fed”. Y así será.

Wells Fargo prevé que el oro cerrará este 2022 cotizando a 2,100 dólares la onza.

No obstante, el oro no será la única materia prima que seguirá brillando con esplendor. Aquí las muestras.

El referencial crudo Brent alcanzó los $105 dólares por barril por primera vez desde agosto de 2014, un aumento de más del 8 por ciento en los mercados internacionales. El WTI subió hasta los 100 dólares en el intradía.

Rusia es el segundo mayor productor de petróleo del mundo y vende la mayor parte de su crudo a las refinerías europeas. También es el mayor proveedor de gas natural de Europa, con alrededor de dos quintas partes de su suministro.

​​Rusia y Ucrania también son grandes productores de metales industriales como el paladio, el níquel y el aluminio. Rusia produce el 6 por ciento del aluminio del mundo y el 7 por ciento de su níquel extraído.

El aluminio subió más del 5 por ciento para alcanzar un máximo histórico de 3.466 dólares la tonelada. El níquel alcanzó su nivel más alto desde mayo de 2011 a 25.240 dólares. El paladio, utilizado en los convertidores catalíticos de los automóviles, cotizaba más de un 5 por ciento al alza el jueves por la tarde, después de tocar los 2.695,57 dólares la onza por la mañana.

En este sentido, con severos problemas en las cadenas de suministro globales que siguen sin resolverse, e históricos estímulos de inyección monetaria tras la pandemia, los activos relativamente escasos como las materias primas y el bitcoin, se seguirán beneficiando de la inflación galopante. En un ambiente como este, dejar pasar la oportunidad que se nos presenta, sería un grave “pecado” financiero.