La polarización ante la actuación de un gobierno se da cuándo unos condenan todo lo que haga sin analizar sus objetivos positivos y otros la aprueban sin pensar en sus consecuencias negativas. Lo correcto es apoyar acciones del gobierno cuando demuestran con razones que sus decisiones resultarán en un beneficio social o criticarlas si las consecuencias son perjudiciales.
El problema surge cuando un gobierno no presenta razones válidas para sustentar una decisión y ni partidarios ni adversarios saben el porqué de esas decisiones. En esos casos surgen especulaciones o afirmaciones sin bases sólidas que se convierten en verdad ante el vacío de razones válidas y claras por parte del gobierno. Eso ha sucedido con algunas decisiones del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Tan grave es que un Presidente no haga nada para no correr riesgos como el que emprenda una acción apresuradamente sin analizar todas sus costos y consecuencias. Así percibe un gran número de ciudadanos el abandono de la construcción del aeropuerto de Texcoco y la escasez de gasolinas como resultado de la lucha contra su robo y la corrupción en PEMEX.
Cada vez que llego al aeropuerto de la CDMX se me hace un desperdicio cerrar sus dos terminales, lo ideal sería construir otro aeropuerto y que funcionen 3 simultáneamente, como en varias ciudades grandes; pero organismos especialistas dicen que no es posible en el Valle de México. El Presidente no ha dado a conocer ningún dato o estudio que avale la operación simultánea de tres aeropuertos alrededor de la CDMX. La mayoría de analistas, empresarios y periodistas, consideran un capricho sin razones objetivas, dejar a la mitad Texcoco, gastar millones para cancelarlo y emprender una alternativa que a lo mejor no funcionará. Faltan datos para fundamentar esa decisión. Lo mismo sucede con Pemex y la escasez de gasolinas. Aplaudo la decisión de combatir los robos en Pemex, pero tengo dudas si era necesario la escasez que se provocó. A falta de razones claras para explicar el desabasto se generaliza la descalificación a AMLO por las largas filas que causó.
Ojalá el Presidente aclare y rectifique esas decisiones, que generan incertidumbre y especulaciones, alimentan el enojo ciudadano y reducen la actividad económica y el crecimiento.