La intención de AMLO (¿queda alguna duda?), es espantar a la inversión directa, destinada a la producción bienes y servicios, con los cuales satisfacemos nuestras necesidades, y con la cual se mide el crecimiento de la economía; a crear empleos, puesto que para producir alguien tiene que trabajar; a generar ingresos, puesto que a quien trabaja se le paga por hacerlo. Y empleos e ingresos son condiciones necesarias para el bienestar de las familias, que debe depender de su trabajo, no de las dádivas del gobierno.
¿De qué dependen las inversiones directas? De la confianza de los empresarios en el gobierno, misma que AMLO ha golpeado insistentemente, con decisiones que van, desde la cancelación de la construcción del NAICM, hasta la contrarreforma eléctrica con la cual pretende devolverle a la CFE el monopolio de todo el proceso de producción de electricidad, desde la generación hasta el suministro, pasando por la trasmisión y distribución, en contra de las empresas privadas que participan en la generación de electricidad y que, previsiblemente, se ampararán contra la medida que las relega injustamente a un segundo plano.
Con relación a este último tema AMLO dijo, en La Mañanera del martes pasado, que los abogados que defiendan a empresas contra la reforma eléctrica traicionan a la patria, un dicho increíble, en el sentido literal del término, que le pega, de nueva cuenta, a la confianza de los empresarios, precisamente por lo increíble del mismo. Abogado que defienda causas contrarias a las de AMLO traiciona a la patria. ¿Quién lo dice? AMLO.
Pasemos del dicho de AMLO a un hecho que, nuevamente, abona a la desconfianza. El comunicado de la Auditoría Superior de la Federación, ASF, en el cual, a poco más de doce horas de que AMLO, en La Mañanera, cuestionara la cifra relacionada con el costo de la cancelación del NAICM, reconoció que hubo un error en el cálculo y que la cifra corregida (que al momento de escribir estas líneas no se conoce), es menor que la originalmente presentada. ¿Realmente hubo un error de parte de la ASF o AMLO le jaló las orejas y ésta respondió a la reprimenda? Cualquiera de de las dos opciones es grave, pero más la segunda que la primera.
Como lo apuntó Pascal Beltrán el Rió en Twitter: “La @ASF_Mexico acaba de hacerle mucho daño a su propio prestigio porque aquí sólo hay de dos: 1) salió de inicio con información incorrecta, ya sea no confirmada o intencionalmente falsa, o 2) su información era correcta y aceptó retractarse como exigió el Presidente”. Y si la primera opción es grave, la segunda lo es más porque supone la sumisión de un órgano, que forma parte del Poder Legislativo, a la voluntad de AMLO, cabeza del Poder Ejecutivo, lo cual genera desconfianza que espanta a las inversiones directas.
E-mail: arturodamm@prodigy.net.mx
Twitter: @ArturoDammArnal