Para entender el orquestado “rechazo” a la liberalización comercial de maíz, frijol, azúcar y leche en polvo en el marco del TLCAN, hay que considerar que el libre comercio disminuye, invariablemente, el número de pobres y, por lo tanto, afecta gravemente el negocio de quienes han explotado políticamente por décadas la pobreza de los campesinos, en lugar de haber explotado, productivamente, la riqueza potencial del campo mexicano.
La pobreza es uno de los filones más lucrativos del oficio político. El negocio radica en exaltar y exacerbar las condiciones de pobreza, al tiempo que se predican con vehemencia la justicia social y la igualdad. El resultado es casi automático: A mayor número de pobres, mayores presupuestos para gasto social, mayores subsidios para “aliviar” las condiciones de pobreza (subsidios manejados por los políticos) y mayor número de votos en la bolsa de los políticos que se han especializado en la explotación de la pobreza.
Cómo afecta el TLCAN al negocio de la pobreza
Juan Pablo Roiz. 7 de enero de 2008
Fuente: Asuntos Capitales