Mes tras mes el INEGI publica el Indicador del Consumo Privado en el Mercado Interno (ICPMI), que mide el comportamiento de las compras, de las familias residentes en México, de bienes y servicios, tanto nacionales como importados, excluyendo la adquisición de vivienda y objetos valiosos, por lo que es un buen indicador del consumo de las familias (CF) y de su nivel de bienestar. El INEGI acaba de dar a conocer los resultados del ICPMI para diciembre de 2018, por lo que ya tenemos el panorama completo del año pasado, que no es alentador.
En 2016 el crecimiento promedio anual del CF fue 4.2 por ciento, con un máximo de 5.1 en febrero y un mínimo de 3.0 en abril. En 2017 fue 3.3 por ciento (0.9 puntos porcentuales menos que en 2016, equivalentes al 21.4 por ciento), con un máximo de 5.2 en abril y un mínimo de 1.8 en diciembre. En 2018 fue 2.4 por ciento (nuevamente 0.9 puntos porcentuales menos que en 2017, equivalentes al 27.3 por ciento), con un máximo de 4.2 en marzo y un mínimo de 0.6 en diciembre.
Sumamos dos años con crecimiento del CF cada vez menor, lo cual afecta al bienestar de las familias, que depende de la cantidad, calidad y variedad de los bienes y servicios de los que puedan disponer. El ICPMI tiene que ver con la primera de estas tres variables: la cantidad.
Pese a los dos años de crecimiento cada vez menor del CF, la desconfianza de los consumidores es hoy menor que ayer.
Mes tras mes el INEGI publica el Indicador de Confianza del Consumidor (ICC) que mide, en escala del 0 al 100, la percepción que los consumidores tienen en torno a su situación como tales. 0 es total desconfianza, 100 es total confianza. Entre 0 y 50 puntos se encuentra la zona de desconfianza, y entre 50 y 100 la de confianza. En febrero de 2018 el ICC se ubicó en 35.0 puntos. Un año después, en febrero pasado, se ubicó en 48.8 unidades. En ambos casos nos encontramos en zona de desconfianza, pero ésta resulta hoy mucho menor que ayer, pese al menor crecimiento del CF.
De los cinco indicadores que usa el INEGI para calcular el ICC, el que tiene que ver con la respuesta a la pregunta cómo considera que será la situación económica de los miembros del hogar dentro de 12 meses comparada con la actual, pasó de 48.9 puntos, en febrero de 2018, a 59.6 unidades en febrero pasado, lo cual quiere decir que, pese al menor consumo registrado en los dos último años, los consumidores encuestados consideran que mañana su situación será mejor que hoy.
El indicador que tiene que ver con la respuesta a la pregunta cómo considera que es la situación económica actual de los miembros del hogar comparada con la de hace 12 meses, pasó de 44.2 unidades, en febrero de 2018, a 49.8 puntos en febrero pasado, lo cual quiere decir que, pese al menor consumo registrado en los dos últimos años, los consumidores encuestados consideran que hoy su situación es mejor que ayer.
Así los datos, así la percepción.
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