El debate y la especulación están enfocados hoy en la dirección que tomará la política monetaria del país, y en medio de la discusión, el Banco de México (Banxico) es señalado por una falta de “experiencia y sentido común”. Ahí resalta la opinión de expertos economistas y banqueros que argumentan que el Instituto Central debería considerar una disminución en su tasa de interés.
Uno de ellos es Enrique Covarrubias, economista en jefe del Grupo Financiero Actinver, quien defiende que una reducción de 25 puntos base al índice de referencia a finales del año no marcaría el comienzo de un ciclo de relajación de la política monetaria, sino más bien un “ajuste fino” que evitaría que la tasa real ex ante se vuelva excesivamente restrictiva.
Las minutas de la más reciente reunión de política monetaria de Banxico señalan la intención de mantener los tipos de interés en el 11.25 por ciento durante un prolongado período, lo que ha generado un ambiente de cautela.
Sin embargo, igual que en Actinver, el consenso de analistas de la Encuesta Citibanamex de Expectativas sugiere la posibilidad (o más bien, un deseo) de un recorte de 25 puntos base en diciembre. En este espacio consideramos que eso sería lo correcto. Un elemento central en este razonamiento es la tasa real ex ante, que incorpora las perspectivas de inflación a 12 meses.
En entrevista con Investing.com México, Covarrubias expone que con base en esa previsión a un año, la tasa real ex ante se ubicaría en el 6.94 por ciento con una tasa del 11.25 por ciento, aproximándose al umbral del 7 por ciento, y afirma que cruzar este límite en las próximas quincenas podría justificar un “ajuste fino” en los tipos de interés. Estamos de acuerdo.
Banxico considera, al respecto, que una tasa real ex ante entre el 1.8 y el 3.4 por ciento es neutra, esto significa que actualmente se encuentra en una zona demasiado restrictiva, después de que en septiembre de 2022 la tasa de referencia aumentara en 75 puntos base, llevándola al 9.25 por ciento. Covarrubias opina, no obstante, que un nivel por encima del 7 por ciento sería excesivamente rudo. No hay duda.
A pesar de la posibilidad de un recorte, el economista de Actinver reconoce que las tasas se mantendrán elevadas por un largo tiempo debido a los riesgos persistentes y las presiones inflacionarias, pues aunque la inflación ha mostrado una tendencia descendente, aún se mantiene por encima del objetivo del 3 por ciento de Banxico.
El reciente dato de la primera quincena de agosto ubicó la inflación en el 4.67 por ciento, con el índice subyacente en el 6.21 por ciento.
Dadas las actuales circunstancias, Covarrubias prevé que la tasa de referencia en México cerrará 2024 en niveles cercanos al 8.75 por ciento, incluso superando el ciclo anterior de tasas, una proyección que refleja la convicción de que la política monetaria en el país se mantendrá en terreno elevado un largo período.
El experto también explora la relación entre las decisiones de los bancos centrales de México y Estados Unidos, pues dice que aunque Banxico afirma que sus resoluciones no dependen de la Reserva Federal (Fed) del país vecino, la política monetaria de EU es un factor relevante en la determinación de las tasas mexicanas.
Sugiere, entonces, que si la Fed concluye su actual ciclo alcista habría un mayor margen para que Banxico realice un “ajuste fino” sin iniciar un período de recortes.